- Con criterios objetivos, transparentes y bien definidos
- La convocatoria acumula un retraso de seis años
- No hay excusa válida una vez publicada la reforma de la Ley de la Ciencia
CSIF denunció con rotundidad la decepción y la frustración de docentes e investigadores universitarios ante los pobres resultados de la convocatoria como proyecto piloto del Sexenio de Transferencia 2018. Su falta de rigor, sus contradicciones y sus retrasos lo revelaron como un auténtico fiasco: la tasa de éxito alcanzó un exiguo y denigrante 42,47%, falló el procedimiento, la comunicación y la transparencia, presentó un marcado sesgo de género, no hubo protocolo único y sí una evaluación de criterios injusta y contradictoria, especialmente en áreas multidisciplinares.
A día de hoy, no hay noticia alguna sobre el sexenio de transferencia que, parece, no termina de solventar sus problemas de gestión y financiación. Desde CSIF consideramos que, una vez publicada la modificación de la Ley de la Ciencia a la que vinculaban todo el proceso, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades no tienen excusa para no sacar ya la convocatoria del nuevo Sexenio de Transferencia con criterios objetivos y corrigiendo las enormes deficiencias detectadas.